SENDERO CREPUSCULAR
Ya no son caminos reales
los que recogen mis pasos,
con sus paisajes verdales
y sus guijarros escasos.
Estrecharon los zarzales
la ruta de mis Pegasos;
quedan duros pedernales
bajo los andares lasos.
Mañana serán veredas
soledad de los caminos,
y al final de la jornada,
el pedregal de mis ruedas
donde mis pasos cansinos
se disipen en la nada.
Adelina Gurrea