HISTORIAS
ROMANCE
Arrastrando por la arena,
como cola de mi luto,
a mi sombra prisionera,
triste y solitario voy
y vengo por las riberas,
recordando y olvidando
la causa de mi tristeza.
¡La ciudad que más quería
la he perdido en una guerra!
Ya no veré nunca más
las dos torres de su iglesia,
ni los caminos sin sombra
de sus brazos y sus piernas.
¡La ciudad que más quería
la he perdido en una guerra!
Manuel Altolaguirre