ELEGÍA NOCTURNA II
Esta noche de luna y soledades,
¡con cuánto amor el corazón te piensa!
Siento la vida lívida y suspensa
en cítaras de esbeltas claridades.
¿Dónde estarás? ¿Por cuáles tempestades
vuela tu corazón? ¿Qué aguas condensa
la nube que te oculta en esta inmensa
noche de soledad en que me invades?
Esta noche de luna y soledades
llevarse de mis manos y esconderlo
entre el agua más fiel del Paraíso.
Y lo aparto de mí tras este llanto
para que tu alma venga a desprenderlo
del árbol sacudido de mi canto.
Carlos Pellicer