QUISIERA LIBERTAD DE EXPRESIÓN Y DE PENSAMIENTO
Mamá, papá
Fueron y son las primeras palabras
enseñadas.
Padre Nuestro que estás en los cielos...
Fue la primer oración
enseñada.
Había una vez una hermosa joven...
Fueron las primeras palabras
enseñadas,
bocanadas de aire para soñar.
Mamá me mima
Fueron las primeras palabras
enseñadas,
caricias de mariposas,
rocío de sentimientos.
Amar,
jugar.
Fueron los primeros verbos
enseñados,
repuestos,
engranajes,
tornillos de oraciones.
Cuando era chica...
Fue la primer oración
enseñada,
en cuentos de experiencias.
—¡Mamá! Me duele la panza.
Fueron las primeras exclamaciones con palabras
enseñadas,
explicando dolores y sufrimientos.
—¡Mamá! Tengo hambre.
Fueron las primeras palabras usadas
enseñadas,
reclamando y exhibiendo necesidades.
Sin saberlo
sería enseñada
sin saberlo
iría aprendiendo
sin saberlo
sabría de temores y miedos
de vergüenzas
de censuras y auto censuras.
Sin saberlo
iría aprendiendo
sin saberlo
sabría de frases hechas
de medias palabras
de prejuicios e ironías.
No.
Fue la primer palabra de censura
aprendida.
¡Cuidado!
Fue la primer palabra de temor
aprendida.
—¡Te vas a quemar!
Fue la primer oración de miedo
aprendida.
—¡Mamá! Me hice caca.
—Pero ¿Cómo vas a decir esto
delante de tu amiguita?
¿No ves, cómo te mira?
Fue la primer vergüenza
aprendida.
—Dame mi pelota ¿Sos boludo?
—¡Carlitos! ¡Te escuché!
¡Esa palabra no se dice!
¡Si vuelvo a escucharla, te pongo en penitencia!
Fueron las primeras palabras de censura
aprendidas.
—¡Viva Perón!
Que grande sos
mi general cuanto valés
¡Viva Perón!
Gran conductor
la — la — lalá — la — la — la — lá........
—¡Carlitos!
¡Eso no se canta!
Te prohibo cantar esa canción.
¿Qué querés?
¿Que nos lleven presos a todos?
Fue la primer censura del saber de auto censura
aprendida.
“No hay nada nuevo bajo el sol”
Fue la primer frase hecha
aprendida.
—¡Carlitos! ¡Te estoy mirando!
Cuando venga tu padre ¡Ya vas a ver!
Fueron las primeras palabras a medias
aprendidas.
No es necesario el todo.
Una sonrisa,
un gesto,
una pequeña
una sola palabra
una media palabra
una media palabra encierra miles de oraciones,
un millón de explicaciones,
infinidad de sentimientos.
Medias palabras,
pocas palabras
dicen más
que mil enciclopedias.
—¿Cuál es?
¿Cuál es, el mejor método anticonceptivo?
¿Cuál es?
¿Cuál es, el más, seguro?
¿Cuál es?
¿Cuál es, el más eficaz? —Una joven
quinceañera, preguntó a su madre.
—Pero
¿Cómo vas a preguntar eso?
¡Espera a llegar a casa, para hablar de sexo!
¿No ves?
Alguien puede escuchar.
¿Qué va a pensar la gente?
¡Una atorrante! Gritarán.
¡Una libertina! Pensarán.
Prejuicios y más prejuicios.
Palabras y más palabras.
Quisiera ser libre,
de pensamiento.
Quisiera ser libre,
de censuras y auto censuras.
Quisiera ser libre,
de ironías y de prejuicios.
Quisiera decir Perón,
sin que me llamen peronista.
Quisiera decir Alfonsín,
sin que me llamen radical.
Quisiera decir:
“Igualdad entre los pobres y los ricos”,
sin que me llamen comunista.
Quisiera reclamar libertad,
justicia,
respeto,
derecho,
sin que me llamen revolucionaria
revolucionario.
Quisiera nombrar antiguos amores,
sin que me llamen:
“Mujer con pasado libertino”
Quisiera escupir al cielo,
sin que me llamen ateo.
Quisiera decir: “Orgasmo,
clítoris,
pene”
sin que me llamen
mal hablado, mal hablada
mal educado, mal educada.
Quisiera decir: “ tomar por agarrar,
coger por disfrutar del sexo
hacer el amor por buscando un hijo”
sin buscar palabras confusas
temiendo un prejuicio.
Quisiera llamar las cosas por su nombre,
sentir libertar.
Quisiera escuchar las palabras exactas
las cosas llamadas por su nombre
sin escuchar censuras,
auto censuras,
prejuicios,
temores,
vergüenzas.
Quisiera tener una conversación sin tapujos.
Quisiera usar cualquier palabra.
Quisiera usar
quisiera escuchar
la lengua española
la más bella de las palabras
lengua española libre
libertad de palabra.
Quisiera sentir
la verdadera
la añorada
“Libertad de expresión”
Por pensar, por llorar, por gritar,
por creer que siempre es posible hablar.
Graciela Kiriadre
Incluido en Ideas Tormentosas - ediciones V - 014 - abril de 2004.