DÍFICIL PAZ
Nada, la paz ya empeñada,
Gastada mi voluntad quebrada
De ondear una bandera blanca,
De esperar una frontera estanca
Donde hombres se hermanen finalmente,
Mil nombres emanan en mi mente,
Concordia, armonía, igualdad,
Me incordia la tiranía, la deslealtad,
Pero la ambición inunda la tierra,
Sinrazón, como abunda la guerra.
Los jerarcas empuñan egoísmo
Tras de arcas que acuñan arribismo,
Circundadas por vinagre sus almas,
Manchadas de sangre las palmas,
Potencias que abocan a la muerte,
Conciencias que revocan de su suerte.
Miguel de Asén