ELEGÍA A UNA MALAGUA

Víctima del sol y de las olas
Más aún del sol
Este perverso disco-lo amarillo

Noventitantas veces consumida
Inmune a la brisa
El alma se te escapa
Y es tu risa la que no sé distinguir
La urticaria punzante de tu risa

Cuándo tu belleza paracaidística
Se negó a mis ojos hambrientos de nada
Cuánto te ame cuando aún morías

Y si mi nacimiento exacto hubiese sido
Al instante de tu muerte
Ahora tu recuerdo no sería
Este rastro indeleble
Nada de vida
Nada de muerte
Nada de Nada.