anterior   aleatorio / random   autor / author   inicio / home   siguiente / next

EL PERRO Y EL CONEJO

(Compuesta en verso por Napoleón I en la Escuela de Brtenne).

César, perro de muestra bien famoso,
Mas vano y jactancioso en demasía,
Arrestado en su albergue mantenía
A un conejillo exánime de susto.
—«¡Ríndete!» le gritó con voz de trueno,
Que hizo temblar la población del bosque,
«Quien te habla es César; de mi nombre augusto
                  Todo el mundo está lleno».

A este gran nombre conejín tirita,
Y encomendando a Dios su alma contrita
Asomó la nariz desde su encierro,
Y con trémula voz preguntó al perro:
                  «¡Señor Excelentísimo!
Sírvase Usía al menos informarme,
Si yo me rindo, ¿cual será mi suerte?
—«La muerte, dijo el can» —«¡Qué oigo! ¡matarme!
¿Y si huyo?» —«Claro está: también la muerte».
—«¡Ah! —replicó el inerme animalillo—,
                  Que vive del tomillo,
Puesto que perecer siempre me toca
Dígnese perdonarme Vuexcelencia
Si trato de escapar de tal sentencia».

Y con la última sílaba en la boca
                  Abandonó la plaza
Y huyó, cual cumple a un héroe de su raza.
Catón lo condenara; mas yo digo
Que hizo muy bien, como que al verlo en fuga
El listo cazador, jefe enemigo,
                  Alza el arma, prepara,
                  Le apunta, le dispara
Y... muere el perro; y conejín se muda.

Aquí el buen Lafontaine añadiría:
Ayúdate tú mismo y Dios te ayuda.
—Y esta moral me cuadra: esta es la mía.

autógrafo

Rafael Pombo


«Poesías Completas»
Fábulas y verdades


subir / top   poema aleatorio   siguiente / next   anterior / previous   aumentar tamaño letra / font size increase   reducir tamaño letra / font size decrease