EN ESTA PÁGINA
Pondré aquí de esta tarde de verano,
aún próxima al solsticio,
su viva luz que no se acaba nunca,
la indolencia del mar
y el desmayado ir y venir apenas
de leve espuma, de murmullos leves.
Sólo esto dejo en el papel, y callo,
para no hablar ahora
de mi melancolía sin porqué
ante tanta hermosura.
Eloy Sánchez Rosillo