LA MÁSCARA
¿Por qué mi faz se ve sin amargura
bajo este plenisol del mediodía,
y es en la noche máscara sombría
de un ser en solitaria crispatura?
¿Qué zarpa sideral me desfigura?
¿Cuál lucero carnívoro podría
macerar inclemente la faz mía,
transformándola en álgida escultura?
¡Oh Poder Abismal al que consulto,
y al que mi instinto escucha y obedece:
deja mi rostro saturnario oculto,
sin esta repugnancia que parece
laceria de un espíritu insepulto,
que exhalara rencor cuando anochece!
Germán Pardo García