OJOS GRISES
No sé qué hurañas regiones
De ventisqueros y riscos,
Se insinúan en los discos
De tus dos ojos lapones.
Noche boreal... Cerrazones...
Kremlin de nácar... Apriscos
De osos que braman ariscos,
Hacia las Constelaciones...
¡No llores, mi dulce Cleo!
Amor regirá el trineo
Por la quimera sin fin...
E iremos hacia los grises,
Vagos, enfermos países
Que hay en tus ojos de esplín...
Julio Herrera y Reissig