HELIOFINA
Dorada a fuego por Amor y llena
De la divina excelsitud de Aspasia:
Éxtasis de nerviosa aristocracia,
Astra sutil de eternidad serena.
Palmeras, espejismos... toda el Asia
Suspira en tus encantos y enajena:
Hurí con ojos de profunda pena,
Musa con labios de erudita gracia,
Las rosas que te ven, dicen: ¡es Ella!...
Y las estrellas cantan: ¡oh, qué Estrella!...
Ríes y evoca tu reír festivo
Los grillos de oro del Amor cautivo;
Y juraría que tu beso sella
Etermidades con el lacre vivo.
Julio Herrera y Reissig